Esta entrada hace tiempo que queríamos compartirla en el blog, ya que es un material que utilizamos mucho en nuestras sesiones de atención temprana. Se trata de LOS COLLARES ORTOFÓNICOS.

Antes de explicaros en qué consisten os remitimos a una separata de FIAPAS dónde hay un Resumen del Trabajo de Investigación de quienes crearon el MOC (Método Oral Complementado), son ellos quienes idearon este interesante recurso para trabajar la fonología con los menores con discapacidad auditiva, sobre todo aquellos parámetros del sonido articulado, tales como: intensidad, duración, prosodia, ritmo y pausa.

Como veis en la imagen, los collares son una serie de piezas de colores y tamaños diferentes. Empezaremos por los colores. Cada uno de ellos representa a una vocal:

A E I O U

¿OS SUENA?

Se corresponden con los códigos de colores de nuestro silabario (pincha aquí para consultarlo), y no es casualidad. De esta forma utilizamos dos «ideas» en una.

Salma trabajando con los collares ortofónicos y el silabario

Además de la identificación de sonidos vocálicos, también podemos trabajar cualidades del sonido como: duración (largo-corto) e intensidad (fuerte-flojo).

La duración del sonido vocálico se corresponde con la forma de la pieza, de esta manera las esferas representan el sonido largo (aaaaaaaaa) y los cilindros el corto (-a-).

Por otro lado, la intensidad está representada por el tamaño, así los sonidos fuertes se corresponden con los tamaños grandes y los flojos con los pequeños.

Este material nos permite alcanzar un nivel alto de complejidad, así que iremos siempre de lo más sencillo a lo más complejo en función de las capacidades de los/as niños/as.

Para elaborar el material nosotras hemos utilizado las piezas de un juego de seriación cualquiera.

Esperamos que os sea de utilidad y que os permita ir creando nuevas actividades, ya que es un material muy versátil.