Desde el servicio de logopedia hemos diseñado este sencillo juguete para trabajar el condicionamiento auditivo, estimular la intención comunicativa y, en último caso, regular la intensidad de la voz.

El bebé con pérdida de audición inicia el balbuceo igual que cualquier bebé normoyente, pero suele desaparecer al no haber feedback auditivo, por eso es importante acompañar las producciones orales con estímulos visuales para que no desaparezca. Lo ideal es hacerlo a través de un material/juguete atractivo para los pequeños pero en el mercado no los encontramos.

Hace tiempo conocimos, a través de las redes sociales, la historia de Cristina y su sobrina. Cristina diseñó un juguete para estimular las producciones orales de la pequeña, que fue diagnosticada de sordera a los dos meses de edad (pinchad en el enlace para saber más de ellas).

Nos pareció una idea fantástica y nos pusimos manos a la obra para crear nuestro propio juguete. Junto con un informático que colabora con la entidad y una voluntaria «modista» nació el burrito de ASPAS, a quien se le encienden las orejas cuando le hablas.

Para elaborar un juguete así, no se requiere de elementos de gran coste, únicamente hace falta: una placa arduino (y saber programarla), cable, dos transistores, lámparas Led, un micrófono, una pila común y elegir la mascota.

Os dejamos con un vídeo de Lluc. Él fue diagnosticado de sordera bilateral profunda al nacer y fue portador de audífonos hasta los 11 meses, cuando fue intervenido para la colocación de implantes cocleares bilaterales. En este vídeo Lluc se recupera de la intervención y no lleva ningún auxiliar auditivo, por tanto, únicamente percibe sonidos graves de alta intensidad. Así juega con el burrito y no deja de emitir vocalizaciones.

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